Una fresca mañana de mayo, tras bajar de una elegante limusina en la calle Félix Faure, paseé bajo las arcadas ocres del mercado de Forville. El aire estaba perfumado de lavanda fresca, mezclándose sutilmente con el aroma de la fougasse recién horneada y las cestas rebosantes de cerezas mediterráneas tan maduras que sus pieles seRead more